Fritz Westover, Universidad Texas A&M y Jim Wolpert, UC Davis
Los daños y trastornos en las plantas de vid pueden ser causados por una gran variedad de factores.
Algunas veces una mancha en las hojas o en el fruto puede ser causada por un insecto o un patógeno biológico de la planta, como un hongo o una bacteria, y otras veces la mancha puede ser producida por factores humanos y ambientales. Un trastorno en la planta de vid que no es causado por una plaga viviente o por un patógeno se conoce como un trastorno abiótico.
Diagnosticando
Antes de diagnosticar un problema abiótico en las planta de vid, es muy importante que se descarte la existencia de plagas o enfermedades, que potencialmente puede haber causado el problema. Existen muchas guías, como el Compendio de las Enfermedades de las Uvas (Compendium of Grape Diseases) o el Doctor de las Uvas (Grape Doctor) que pueden ser herramientas útiles para el diagnostico de los síntomas de plagas y enfermedades. Algunas plagas o enfermedades que producen síntomas en las uvas suelen confundirse con trastornos abióticos, por lo tanto es importante consultar a su agencia local de Extensión Agrícola para confirmar cualquier diagnostico antes de implementar un tratamiento.
Trastornos Químicos
Daño causado por un herbicida. Empezando arriba a la izquierda en dirección a las manecillas del reloj: Daño por Simizine, Glicofosfoato, y Fenoxi (fotos de abajo). Fotografías tomadas por Fritz Westover, Universidad Texas A&M.
Las manchas en las hojas son uno de los síntomas más comunes de los trastornos abióticos. Las manchas en las hojas pueden ser causadas por el goteo, caída o rociado de herbicidas no intencional, o por una inadecuada mezcal de plaguicidas o fertilizantes rociados en las plantas de vid. Incluso cuando los productores han aplicado el mismo producto en el pasado sin tener ningún problema, los cambios climáticos o las dosis de los productos pueden provocar algún daño en las plantas. Por ejemplo, muchas formulaciones que contienen azufre pueden causar quemaduras en las hojas, si se aplican en días calientes y en condiciones de humedad ambiental excesiva, lo mismo ocurre cuando se aplican fungicidas que contienen cobre, estos pueden causar una lesión similar si se aplican en días fríos y húmedos. También, la falta de limpieza del tanque de aspersión cuando se cambia de producto puede provocar manchas en las hojas y en los racimos.
Manchado de las uvas antes del envero. Estos daños fueron provocados por una inadecuada limpieza del tanque de aspersión antes de mezclarlo con un nuevo fungicida. Fotografías tomadas por Patty Skinkis, Universidad Estatal de Oregón.
Sin embargo, el goteo no intencional de herbicidas es la causa más probable de las manchas y crecimiento deforme en las hojas. Los herbicidas de contacto como el glufosinate or paraquat pueden producir manchas marrones necróticas en las hojas, cuando el contacto con el producto es limitado estas manchas muy raramente conducirán a la muerte de la planta. Es muy importante tener en cuenta que no todos los daños provocados por los herbicidas son resultado de la aplicación que realiza el productor. La aplicación de herbicidas sistémicos como el glifosato puede causar daños más severos, como hojas deformes y la posible muerte de la planta de vid. Los herbicidas Fenoxis como el 2,4-D pueden ser transportados de terrenos vecinos y causar distorsiones irreversible en las hojas, y en algunos casos la muerte de la planta.
Si su viñedo tiene riego, conduzca pruebas en el agua periódicamente para checar las impurezas. Altos contenidos de sal en el agua de riego o las acumulaciones de sales en el suelo, también pueden provocar quemaduras en las hojas de la vid o la muerte si no se detectan a tiempo.
Trastornos Ambientales
Los factores ambientales también pueden ser la causa de las manchas en las hojas. La presencia de Ozono en la atmosfera que rodea al viñedo, por ejemplo, puede causar pequeñas manchas o puntos oxidados en la parte superior de las hojas en variedades de uva susceptibles. El fluoruro de hidrogeno también ha provocado quemado o o necrosamiento en las hojas en viñedos que se encuentran cerca de zonas industriales en donde estos compuestos contaminantes son producidos. Las sequias son otro factor ambiental que puede limitar severamente el crecimiento de la planta de vid. Las condiciones de sequia puede reducir la capacidad de la planta para tomar nutrientes del suelo, provocando deficiencias nutricionales y decoloración de las hojas. Largos periodos de sequia pueden conducir a la muerte de las puntas de los brotes de vid, al retraso en el crecimiento de la planta, así como en la maduración de la fruta. Otros factores ambientales que pueden causar problemas en las plantas de vid son el granizo, los rayos solares, y las heladas o congelamiento de las plantas.
Trastornos ambientales incluyendo la muerte de las puntas de los tallos causados por la sequia (izquierda) y las manchas oxidadas causadas por el ozono. Fotografías tomadas por Fritz Westover, Universidad Texas A&M.
Desbalances Nutricionales
Deficiencias y toxicidades de los nutrientes. De arriba-izquierda -manecillas del reloj-: Clorosis por hierro en el suelo con elevado pH en condiciones húmedas. Toxicidad por asperjar boro, y quemadas de azufre (fotos de abajo). Fotografías tomadas por Fritz Westover, Universidad de Texas A&M.
La decoloración de las hojas de la uva o las deformaciones también pueden ser causadas por deficiencias nutricionales o toxicidades. Las deficiencias nutricionales pueden ser difíciles de diagnosticar especialmente si están involucrados o ausentes múltiples nutrientes. Lo mejor es tomar una muestra del suelo y de los tejidos de la planta y llevarlos a un laboratorio con buena reputación para ser analizados, una vez entregados los resultados y antes de que diagnostique un problema nutricional es conveniente discutir los resultados con su Extensionista, o con un asesor privado. Una sobre aplicación de fertilizantes es normalmente fácil de diagnosticar, ya que el productor puede revisar sus registros con un profesional y determinar si algún producto fue aplicado incorrectamente. También, los análisis de los suelos pueden indicar otros factores subyacentes que podrían predisponer al viñedo a un desequilibrio nutricional.
Las deficiencias y toxicidades de los nutrientes pueden causar la decoloración y la deformación de las hojas y los tallos de las plantas de vid. Fotografías tomadas por Patty Skinkis, Universidad Estatal de Oregón.
Revisando los Patrones
El patrón de expresión de los síntomas es frecuentemente la clave para entender la naturaleza del trastorno. Los productores deben tratar de contestarse las siguientes preguntas,
- ¿Los síntomas en las hojas se encuentran en las hojas basales, en medio o en las hojas apicales en un tallo?
- ¿Los síntomas se presentan en el exterior o en el interior de las hojas solamente?
- ¿Los síntomas se presentan solo en algunos tallos o en todos los tallos de la vid?
- ¿Los síntomas en las hojas se expresan solamente en los márgenes o muestran distintos patrones?
- ¿Las plantas de vid que presentan síntomas están juntas o distribuidas en todo el viñedo, o ¿estos síntomas solo se están presentando en plantas ubicadas en las orillas de las hileras?
- ¿Hay plantas de vid que muestran síntomas y que están relacionadas con cierta área topográfica del sitio, como un canal, drenaje o colina?
- ¿Cuál es la época del año o estado de desarrollo de la vid cuando aparecen los síntomas: primavera cuando los brotes empiezan a crecer, al inicio del verano cuando la planta esta floreando, al final de verano cuando los racimos empieza a madurar, o en el otoño durante o después de la cosecha?
Los productores deben documentar sus observaciones en notas de campo y tomar fotografías, especialmente cuando los síntomas se empiezan a observar.
Resumen
Los trastornos en las plantas de vid pueden ser el resultado de factores biológicos y abióticos. Cuando se determinan las causas y los síntomas del trastorno, es importante considerar todos los factores que pudiesen contribuir al problema. En algunos casos, los síntomas pueden ser causados por un producto químico o un fertilizante que el productor ha aplicado, o por compuestos químicos que llegaron al viñedo de granjas vecinas. En otros casos, el problema puede ser causado por una contaminación ambiental o clima extremo. Hay instancias o periodos donde los trastornos de la vid pueden ser remediados con la intervención del productor, pero no todos los desórdenes o trastornos pueden ser controlados del productor. Un diagnostico rápido y certero del trastorno es esencial antes de que se pueda implementar cualquier plan para corregirlo, así como para reducir la recurrencia de este padecimiento en el futuro.
Sitios y Referencias Recomendados
Compendio de Enfermedades de la Uva 1988. Sociedad Americana de Fitopatología (Compendium of Grape Diseases. 1988. American Phytopathological Society)
Identificando trastornos por plagas y abióticos Universidad de California (Identifying Pests and Abiotic Disorders, University of California)
Exploración y diagnostico de problemas en los viñedos, Universidad Estatal de Michigan (Scouting Vineyards and Diagnosing Problems, Michigan State University)
Manejo de las enfermedades de las uvas (Grape Disease Management Overview)
Daño causado por Herbicidas en las vides (Herbicide Injury on Grapevines)
Daño causado por granizo en las vides (Hail Damage on Grapes)
Daño por quemaduras de sol en las Uvas (Sunscald Damage to Grapes)
Daños, cuidados y protección de las Heladas (Frost Injury, Frost Avoidance, and Frost Protection)
Monitoreando la Nutrición de las Vides (Monitoring Grapevine Nutrition)
Nutrición de la Vid –Herramientas de aprendizaje y diagnostico en línea (Grapevine Nutrition – online learning module and diagnostic tool)
Revisado por Patty Skinkis, Universidad Estatal de Oregón y Ed Hellman, Extensión Texas AgriLife
Traducido por Maria G. Fabregas-Janeiro, Universidad Estatal de Oklahoma