Conceptos Básicos del Balance de la Planta de Vid (Basic Concept of Vine Balance)

Patty Skinkis, Universidad Estatal de Oregón

Las Bases

El balance de la vid es el concepto central en el estudio de la vitivinicultura donde la fisiología de la planta y la producción del viñedo emergen. Este concepto fue introducido hace mucho tiempo y posteriormente ha sido definido por investigadores alrededor del mundo. Ejemplos del balance de la vid son fundamentales para la producción del viñedo y han  surgido de la investigación realizada durante el siglo pasado. Nelson Shaulis desarrollo el método de poda balanceado el cual evalúa las decisiones que se toma en la poda, con el objetivo de alcanzar el balance de la vid (Shaulis, 1966). Muchos investigadores han definido aún más este concepto de balance tratando de entender el impacto de esta práctica en la producción y el crecimiento sustentable y desarrollo de la vid, incluyendo el impacto que tiene en el manejo del dosel, el efecto en la floración y la formación de la fruta, la influencia en el letargo, la resistencia al invierno, así como en la calidad de la fruta. Los estudios continúan actualmente para comprender mejor la producción y la fisiología en relación con el balance de la vid.

El concepto de balance en la vid es a menudo más fácil de entender en teoría que en la práctica. Vitivinicultores aprenden que el balance de la vid se define como el estado en el que el crecimiento vegetativo y el reproductivo están “equilibrados” o “balanceados”. A diferencia del concepto de equilibrio de los vinos, el cual es un concepto más subjetivo. El balance de la vid mide la capacidad de crecimiento de la planta de vid a través del rendimiento de los frutos y el tamaño de la planta (área foliar o peso de poda), y tiene algunos conceptos o pautas generales para comprender si la planta de vid está en buena forma (es decir vigorosa o débil). 

Explicándolo más sencillamente una planta de vid balanceada se define y se calcula como la proporción entre  el rendimiento y el tamaño de la planta. Esta relación es conocida como carga de cultivo o carga de cosecha y es calculada tomando la producción o rendimiento  de la vid y dividiéndola entre el peso de poda. Hay dos ecuaciones diferentes para la carga del cultivo o de cosecha, el índice Ravaz y la Relación Crecimiento-Rendimiento. La diferencia entre estas dos ecuaciones es:

  • Índice Ravaz  = Rendimiento/ Peso de Poda, rendimiento de la cosecha actual contra el peso de poda en la temporada siguiente. Nota: Este cálculo es el más utilizado.
  • Relación entre el Crecimiento-Rendimiento = Rendimiento/Peso de poda, donde el peso de poda de la estación de latencia es comparado contra el rendimiento de la temporada siguiente. 

 


Una planta de vid débil durante la estación de latencia. Pueden observarse tallos cortos y delgados. Fotografías tomadas por Patty Skinkis, Universidad Estatal de Oregón.

El número resultante es una relación, y por lo tanto no tiene unidades. Investigaciones conducidas a la fecha indican que el balance de la vid es obtenido cuando esta relación está entre cinco y diez para Vitis vinífera. Esta relación es bastante grande, pero se requiere, ya que hay diferentes niveles de balance de la vid basados en el sitio en donde está establecido el viñedo y las metas de producción. Las tasas o relaciones de carga de los cultivos que están por debajo del rango óptimo están siendo sub-cultivadas (bajos rendimientos en grandes plantas de vid), mientras que los números más altos, al final del espectro señalan un sobre-cultivo  (más fruta y pequeñas plantas de vid). Estos extremos pueden llevar a la planta de vid a una producción insostenible.

El área de la hoja es otro indicador que se ha utilizado para entender el balance de la vid, comparando los rendimientos con el área de la hoja. Muchos estudios se han realizado a través de los años para definir el área de hoja requerida para madurar la fruta adecuadamente. Kliewer and Dokoozlian (2005)  encontraron que 0.5-1.2 m2  de área de hoja es requerida para madurar un kilogramo de fruta, dependiendo del sistema de guiado. Aunque esta medida es importante para entender del tamaño de la planta de vid, es menos práctica de monitorear, ya que tomar estos datos es más tedioso y tomará más tiempo que pesar el material podado. También hay que considerar, que las áreas de hoja son manipuladas en el viñedo a través del manejo del dosel y puede ser difícil interpretar los registros.


Una planta de vid más vigorosa presenta tallos largos y gruesos. Estas diferencias son documentadas en los datos del peso de poda. Fotografías tomadas por Patty Skinkis, Universidad Estatal de Oregón.

El balance de la vid es complicado y está influenciado por el suelo, el ambiente y la capacidad de producción del viñedo. Puesto que hay muchos factores que influyen o juegan un rol importante en el balance de la vid, no existe una guía única y clara de cómo puede balancearse la vid en todos los sitios. Los métodos para lograrlo dependen de los siguientes factores:

  • Medio ambiente
  • Suelos
  • Disponibilidad de agua
  • Variedad
  • Patrón o porta-injerto
  • Diseño del viñedo (espaciamiento, sistema de guiado)
  • Manejo del suelo del viñedo
  • Nutrición
  • Enfermedades y plagas
  • Practicas de manejo
  • Metas de producción

Determinando el Balance de la Planta de Vid

La planta de vid, como otros organismos vivos reflejará lo que pasa en su entorno. Los métodos de manejo juegan un papel fundamental en el equilibrio de la planta de vid, pero son secundarios si lo comparamos con el potencial del crecimiento de la propia planta de acuerdo al sitio del viñedo (suelo, precipitación, clima) y al material genético de la planta (variedad y patrón o porta-injerto).

Los viñedos establecidos en suelos fértiles con buena capacidad para la retención del agua serán capaces de crecer y producir altos rendimientos, en comparación con los establecidos en suelos delgados con baja capacidad de retención de agua. Es decir, plantas de vid que crecen en áreas de recursos ilimitados en cuanto a la humedad del suelo, nutrición mineral y clima (sol y unidades de calor) serán capaces de producir niveles máximos de carbono para la producción de fruta, para su crecimiento vegetativo y para establecer sus reservas para la siguiente estación de crecimiento. Contrariamente, aquellas plantas de vid que crecen donde los recursos son limitados serán más débiles y tendrán menos carbono disponible durante su estación de crecimiento y menos reservas para la siguiente estación. En estos escenarios divergentes, el espaciamiento entre plantas, el podado, el guiado de las vides, el sistema de soporte, y los rendimientos deberán ser determinados para permitir que la planta de vid alcance el balance entre el crecimiento del dosel y la fruta en ese determinado sitio. El balance de la vid determinará en última instancia el diseño del viñedo y las decisiones de manejo que se requieran.

El Vitivinicultor determinado el Balance de la Vid

El vitivinicultor determina el balance de la vid a través de las metas de producción del viñedo, los métodos de manejo, y la economía de la empresa. Estas prácticas de producción que no agregan valor a la producción del viñedo darán como resultado inevitablemente la no sustentabilidad de las prácticas de producción, ya que reducirán la salud de la planta, los rendimientos y/o la calidad de la fruta. Por ejemplo, limitando severamente el rendimiento del viñedo a través del adelgazamiento  para la producción de uvas de alta calidad puede resultar en vides que estén muy por debajo de su capacidad de producción (sub) y por lo tanto el desarrollo vegetativo será demasiado vigoroso, esto puede traer como consecuencia una baja formación de fruta, doseles sombreados, y un incremento en la incidencia de enfermedades, así como la elevación de los costos del manejo del dosel. En viñedos donde las plantas de vid necesitan competir por el agua, por el pobre manejo del suelo y/o la irrigación ineficiente y que producen altos rendimientos, se presentarán problemas tales como la reducción en la calidad de la fruta (pobre maduración), debilitamiento de la madera, pobre desarrollo y rompimiento de las yemas o brotes. Por lo tanto, el balance del viñedo realmente depende de la habilidad del vitivinicultor de determinar la capacidad de sus plantas de vid maximizando sus rendimientos y/o la calidad de la fruta a un costo razonable.

Plantas No Balanceadas

Las plantas de vid que no están balanceadas presentan cambios significativos en varios factores.  Todos estos factores afectarán el tamaño de la planta y su rendimiento. Plantas de vid sobre vigorosas frecuentemente presentan problemas de pobre desarrollo de las yemas frutales, reducida formación de la fruta, y pobres rendimientos. A menos de que estas plantas se manejen adecuadamente, su crecimiento vegetativo será incontrolable. Además, estas plantas de vid mal balanceadas tendrán menos resistencia al invierno y la sobrevivencia  de las yemas será menor en los inviernos severos. Simplemente cortando el exceso de material vegetativo en los doseles vigorosos, podando las orillas o eliminando el exceso de hojas, puede ayudar a modificar el microclima de la planta, pero estos métodos no llevarán a la planta a alcanzar su balance. Se debe tener especial cuidado en detectar las causas del excesivo crecimiento de la vid, como pueden ser la fertilidad, la humedad del suelo, y los niveles de cultivo.

Vides débiles pueden experimentar el mismo efecto que las vides con crecimiento vegetativo excesivo. Pueden reducir el desarrollo de las yemas frutales, lo que provocará una reducción en los rendimientos. Las vides débiles pueden también sufrir una reducción en la brotación de sus yemas en primavera, así como un desarrollo pobre de los tallos o brotes, debido a las limitadas reservas de carbono para la estación de crecimiento. En vides demasiado débiles, el crecimiento de los tallos puede detenerse al inicio de la primavera o en la estación de crecimiento. Como resultado, los brotes o tallos no crecerán lo suficientemente para soportar la fruta y se requerirá entonces que se adelgace la cosecha para que las reservas de carbono sean suficientes.

Vides sobre o sub cultivadas pueden dar lugar a un súper o a un reducido vigor en la planta, respectivamente. Sin embargo el nivel del cultivo no es el único factor que determina el alto o bajo vigor de las vides.

Como medir el Balance de la Vid

El balance de la vid es medido directamente a través de los pesos de poda y los rendimientos en la cosecha. Los pesos de poda en los periodos de invernación de la planta representan “el tamaño de la vid” y pueden indicar si el vigor de la planta de vid es alto, moderado o bajo. Los pesos de las cañas son a veces mejor indicadores del tamaño de las vides, ya que esta medida considera el peso individual de los tallos. Este es un cálculo muy sencillo que considera el peso de poda por planta, y lo divide entre el número de brotes (por planta). A pesar de que el viñedo puede ser guiado y manipulado durante la estación de crecimiento, los pesos de poda siguen siendo muy útiles para determinar y comparar el tamaño de la vid y de los bloques de los viñedos. La siguiente tabla muestra algunos indicadores básicos conocidos para el óptimo peso de poda.

Es crítico comparar el rendimiento de la cosecha con el peso de poda. Esta medida se requiere para calcular el peso de cosecha (rendimiento/peso de poda). Realizar comparaciones  entre los datos colectados en varias temporadas de crecimiento ayudará al productor a determinar el impacto de las prácticas de manejo en la producción y calidad de la fruta de su viñedo. Llevar registros de la producción del viñedo en la temporada de reposo (lag) (conocida también como la temporada de peso) es importante para interpretar los datos del viñedo y la carga de la cosecha, particularmente si la cosecha es recogida al final de la temporada. Esto le dará una idea de la formación de la fruta, del factor de incremento del periodo de reposo a la cosecha, y de la interpretación de los verdaderos niveles de cultivo de la vid.

Resumen

Un vitivinicultor entrenado puede detectar fácilmente cuando una planta de vid esta en balance. Sin embargo, además de las observaciones es importante mantener registros documentando la historia de su viñedo, incluyendo los pesos de poda, los rendimientos, y la carga de cosecha (Índice Ravaz), los registros de nutrición, el manejo de las plagas, etc. Todos estos factores necesitan ser considerados en el sistema de producción del viñedo, ya que juegan un importante rol en el balance de la planta, la calidad de la fruta, y la salud del viñedo.

Literatura Citada:

Kliewer W.M., and N.K. Dokoozlian. 2005. Leaf Area/Crop Weight Ratios of Grapevines: Influence on Fruit Composition and Wine Quality. American Journal of Enology and Viticulture 56:170-181.

Ravaz, L. 1903. Sur la brunissure de la vigne. Les Comptes Rendus de l’Académie des Sciences 136:1276-1278.

Shaulis, N. J., T. D. Jordan and J. P. Tomkins. 1966. Cultural practices for New York vineyards. Cornell Extension Bulletin 805: 33-34.

Sitios Recomendados

Howell, G.S. 2001. Sustainable Grape Productivity and the Growth-Yield Relationship: A Review. American Journal of Enology and Viticulture 52:165-174.

Adelgazamiento de la cosecha: Adelgazamiento  o eliminación de racimo(s) (Crop Thinning: Cluster Thinning or Cluster Removal)

Guía de Manejo del Suelo del Viñedo (Overview of Vineyard Floor Management)

Balance de la Vid y su Rol en el diseño del Viñedo (Vine Balance and the Role of Vineyard Design)

Monitoreando la Nutrición del Viñedo (Monitoring Grapevine Nutrition)

Revisado por Jodi Creasap Gee, Universidad de Cornell University y Bruce Bordelon, Universidad de Purdue
Traducido por Maria G. Fabregas-Janeiro, Universidad Estatal de Oklahoma